EL ORADOR DE LOS MUERTOS DE DIRIAMBA

El Gemelo

El idealista humanista  orador de los santos sepulcros, el que siempre acompaño a los cortejos de todos los entierros, amable  y pavoroso,  sonriente  y vestiente  ceremonialmente , su uniforme  fiel de los velorios y mortorios, infallable de saco y corbata, de colores  plomo, café o  negro, eras  de esperarlo al  informarse a través de radio quijada o los alto parlante de don Miguel Urtecho, que se había muerto alguien, estaba siempre presente en el centro y en los suburbios de los barrios de diriamba, jovial contento de servir al sufriente, dándole el abrazo fraternal a los abatidos del fallecido, tocaron sus manos, tantas  maderas de caja de muerto, cargaron sus hombros tantos muertos dentro de su caja ,ese era el amigo Reynerio Robleto el Gemelo, el hombre que figuraba como un laurel  en los entierros, son incontables a los que despidió hacia el cementerio,  en el atrio de nuestra  iglesia basílica  menor de San Sebastian y en la plaza del cementerio,  al pies de los fríos de las humedad tumbas con su discurso sonoros a los mas notables hombres probos, ricos y pobres, acompañando  los fúnebres místicos silencioso ceremonioso  que juzgan al fallecido hasta los  mas profundos  de su vida, su  voz irrumpió tantas veces, los suspiros y llantos  de los dolientes, y escribió historias de paz y resignación por sus deudos y con sus melódicos cánticos de sus teclados de diente hacia recordar una y otra sinfónica del difunto, parecía  a otro gran orodar del siglo xx de Diriamba don José Esteban Rojas., a la cabeza tras el féretro el padre difunto don Juan Hildebrando Robleto Robleto (don Juan Milo), gran futbolista de los años 40 y su hijo también difunto Renaldy Robleto,   detrás va el  cortejo del pueblo, murmullan los labios, lloran y rezan los hermanos, el trovador de los sepelios de Diriamba el  gemelo Reynerio Robleto es el muerto, va firme y serio, frío en su humilde cristiano santo ataúd , del  que se levanto por un momento, se detuvo la peregrinación, la gente no lo creía, los  pelos se le ruborizaron a los presentes,  otros decían silencio silencio  va hablar el gemelo, el del don de la palabra  y con su voz pausada de recia tonalidad, quebrantada por rezar tanto en su vela, agotado sin dormir toda la noche y casi todo el día, adolorido sus espaldas  de estar mucho tiempo acostado en su caja, se dirigió a todos, amigos y compañeros Diriambinos, en este día en este entierro hoy no habrá mas discurso, Reynerio cerro sus ojos el 26 de agosto del 2006 y descanso al pies del celestial padre nuestro que estas en los cielos .

Dr. Douglas Arias González

Medico y Poeta

Con todo respeto y estima para su familia

Todos los Diriambinos